Michel Sloukgi tiene 23 años y actualmente cursa su último año de administración de empresas en el Inacap de Las Condes. Tal como cuenta, su vida era bastante normal en términos de deporte hasta que se cambió de casa en marzo del 2015. “Desde chico me gustaba el fútbol y siempre he jugado en ligas con amigos, pero más allá de eso nunca me dediqué a ningún otro deporte”. A la fecha, vive en unos departamentos de la calle Francisco Bulnes Correa, ubicados en la misma comuna en donde estudia y a escasos metros del cerro Morro Las Papas. “Sentí que tenía tan cerca el cerro y que la geografía de mi casa nueva me estaba ofreciendo conocer un nuevo deporte de tan fácil acceso, que me pasaba si no aprovechaba”.
Así es que empezó a subir con frecuencia el cerro -el cual prácticamente es el patio de atrás de su departamento-. En un comienzo una vez por semana, hasta llegar a alcanzar la cumbre cuatro veces semanalmente, “es un relajo y una forma de escapar de cualquier cosa mala que me pueda estar pasando durante la semana (…) además voy escuchando a los pájaros, hay días en que me pillo con los caballos y vacas y puedo hacer diferencia en cuanto al estado del aire”. Si bien actualmente está terminando su semestre y la carga académica es más exigente, se hace el espacio como puede para escaparse al cerro y meditar algunos minutos del día desde lo alto.
Michel cuenta que desde que sube el Morro Las Papas, se ha encontrado con otras personas en no más de tres ocaciones, y recuerda una anécdota “una vez me encontré con un señor que a simple vista se veía muy pro, con varios litros de agua y algunas bolsas de frutos secos. Me invitó a seguir subiendo el cerro a su ritmo y acepté el desafío. A medida que fuimos conversando, me fue contando cosas sobre el Morro Las Papas y sobre su vida personal. Me dijo que trabajaba en la clínica de la Universidad Católica (que queda muy cerca del cerro) y que los días miércoles usaba su ventana de almuerzo para subir rápidamente el cerro para airearse del trabajo. Además, este señor me explicó que el Morro Las Papas tiene aproximadamente 200 metros menos que el Cerro Manquehue (el cual cuenta con 1.638 msnm) así es que me di cuenta que el ejercicio que hacía cada vez que subía el cerro no era menor”. Frente a los accidentes y pérdidas que han sufrido jóvenes que deciden subir el cerro, Michel, quien ya lleva dos años y medio dedicándose al trekking, sentencia que la preparación previa es trascendental. “Hay que ir full equipado, con comida, agua y algo para abrigarse si es necesario”. Cada vez que sube saca fotos de la vista que el Morro Las Papas ofrece para quienes se animan a llegar a su cumbre y para mostrarle a sus amigos de lo que se están perdiendo, Michel cree que esta actividad física no solo le ha contribuido en una mejoría a nivel corporal, sino que también e indudablemente a nivel mental. Dice sentirse menos ansioso y mucho más relajado para afrontar el día a día. “Subir el cerro es como cargarme de un superpoder para el resto del día”.
Author: parquesdechile
Conmemoración Reserva Nacional Cerro Castillo
Fundado en el año 1970 bajo el mando del Presidente Eduardo Frei Montalva, cada 19 de julio la Reserva Nacional Cerro Castillo cumple un nuevo año desde su inauguración. El lunes recién pasado, este parque chileno cumplió su año número 47 al servicio de los turistas, y la CONAF lo recordó a través de su cuenta de Twitter. Con una superficie total de 138.164 hectáreas y ubicada en la Región de Aysén, al visitar esta reserva se pueden avistar especies típicas de la fauna chilena tales como el huemul, chingue y zorro colorado. Es importante destacar que todos estos animales se encuentran amenazados por el hombre, por lo que los guarda parques enfatizan su trabajo en la protección de estas especies. 
Al visitar la Reserva Nacional Cerro Castillo, hay distintas zonas a lo largo del parque en donde se puede acampar pagando $5.000 pesos la noche y, por su parte, el trekking es actividad obligada, con senderos que llevan hasta la cumbre del Cerro Castillo, con 2.318 msnm, y el Cerro Las Cuatro Cumbre, con 2.273 msnm. Para más información sobre esta reserva nacional, puedes enviar tus dudas al 67-2212225, 2212115, o bien escribiendo a la dirección email aysen.oirs@conaf.cl.
Revisa un video de la reserva acá:
Recorriendo la Carretera Austral: Pumalín
Este verano decidí conocer nuevos parques de la carretera austral. Para eso, mi primera parada fue el parque Pumalín.
Comencé mi viaje desde Quellón en Chiloé. Ahí tomé la barcaza Jacaf con destino a Chaitén y el viaje duró aproximadamente 5 horas. Fue un recorrido amable, con vista a islas vírgenes y al volcán Corcovado.
Una vez en Chaitén, empecé a hacer dedo con la finalidad de entrar al Parque Pumalín. Con el paso de algunos minutos e incluso horas detenida en la berma del camino de ripio, conseguí entrar al parque nacional. Estuve 6 días recorriendo y definitivamente tuve mucha suerte. Me tocaron días lluviosos, algunos con mucho calor y otros un poco nublados que hicieron muy agradable caminar por diferentes senderos.
A lo largo de mi estadía, tuve la posibilidad de ver pudús, alerces literalmente milenarios, hacerme amiga de algunos guardaparques que me ofrecieron cargar mi celular para seguir sacando fotos e incluso subir al enigmático volcán Chaitén. Fue una experiencia que enriqueció mi visión sobre el sur de mi país y que me incentivó a estar buscando destinos de parques nacionales para el verano 2018.
Parques de Chile 